viernes, 18 de enero de 2008

Cuando la vida cambia

Muchas veces al final del día me parece que no hice los suficiente como para considerarlo aprovechado. Es como si me preguntara ¿Qué hice hoy?, seguí una rutina sin nada nuevo, por hacer, ni siquiera fui a ver a mi baby, a partir de ahora le voy a llamar meu neno.
Mucho tiempo libre no tengo, pero partiendo de la base que casi se puede decir que vivo sola, tendría que tener tiempo en hacer cosas pero me aturullo, no sé como.
Bueno, tengo dos perros, he de confesar, que mucho no los quiero. Será porque los trajo mi hijo diciendo que él los iba a cuidar y a los pocos meses se fue de casa, se casó, sé que es algo habitual, los llevo y los cuido, dijo en su día, la mamá acaba encargándose de todo, Es algo muy fuerte que mis hijos tan jóvenes se casaran, claro, hacen su vida.
Cuando otras madres,dicen, por ejemplo, "mi hijo tiene treinta y tantos y no sé como hacer para que se vaya de casa, siempre pienso, ojalá estuvieran los míos, tan siquiera un poquito más.
Es muy duro, quiero decir para mí, que un año se case un hijo y al siguiente el
otro, es un vacío tremendo. Me vi de la noche a la mañana que las cosas habituales que hacía ya no tenían sentido.
A veces me digo a mi misma, me gustaría, aunque solamente fuera una semana tener ese ajetreo que se tiene cuando estábamos todos en casa,
Lo importante es que son felices y yo ... tengo que adaptarme, simplemente.
Nos hablamos y nos vemos a diario.
Sé que son cosas mías, opino así.En su día hice lo mismo y las cosas no son como uno quiere o le gustaría.
Un saludo.

1 comentario:

FFS dijo...

Te comprendo bien. Tengo 2 niñas, una de 3 años y otra de 5 meses, y los abuelos están locos por ellas.